TAROT, CABALA Y ENEAGRAMA: Raziel Tarot

Ecco cosa Rachel Pollack ha da dire su questo suo mazzo:

"Sono così entusiasta di questo progetto. È qualcosa su cui ho riflettuto per anni ed entusiasti del fatto che Robert Place e io l'abbiamo creato insieme. Si basa su temi e immaginari esoterici ebraici - come pure sulla tradizione dei Tarocchi - lavorando sull'idea dell'esilio dal nostro vero sé, ma anche con l'idea cabalistica radicale che gli aspetti maschili e femminili di Dio sono in esilio gli uni dagli altri, e noi esseri umani abbiamo una parte importante nel ripristinarli. Il nome del mazzo, The Raziel Tarot - Il libro segreto di Adamo ed Eva - proviene dall'antica storia che prima che Adamo ed Eva furono esiliati dal Giardino dell'Eden, l'angelo Raziel (nome significa "Segreto di Dio") diede loro un libro di segreti che ha rivelato tutti i misteri dell'universo, inclusi tutti gli eventi futuri. Questo libro passò segretamente a Noè, Abramo, Giuseppe (che lo usò per la divinazione, di cui la Bibbia ci dice che fece con una Coppa) e al Re Salomone, il maestro di ogni magia. (Un ipotesi di chi è il mago!)

Robert ha realizzato immagini incredibili e ho fatto incredibili scoperte nelle leggende ebraiche che funzionano perfettamente con le tradizioni dei Tarocchi ".

IL MATTO E GIUSEPPE NEL SUO FOLLE VAGARE VERSO L'EGITTO

EL MAGO ES EL REY SALOMON

La Magia Salomónica tiene sus fundamentos en la Cábala, también llamada Magia Hermética o Enoquiana. De la inmensa sabiduría infundida en el Rey Salomón deriva el poder esotérico de los 45 Talismán Pentáculos, Sellos Angélicos y Sellos Demoníacos que él creó, la inmensa construcción del templo. La célebre Clavicula Salomonis (de orígenes babilónico y semítico) es probablemente el tratado sobre Magia Ritual más famoso al que se opuso la Inquisición catolica, por considerarlo peligroso en aquellos años oscuros. Lo único que puede ser peligroso para el hombre es la ignorancia. Cuando se trata de sellos mágicos hoy en día, está claro que se recuerdan los sellos salomónicos.

LA SACERDOTISA ES LA SHEKINAH

La palabra Shekhinah es una transliteración del sustantivo singular femenino hebreo שכינה que significa morada. Dentro de la tradición bíblica y teológica judía indica la presencia física de Dios por lo tanto es el lugar donde mora Dios, donde tu encuentras a Dios. En este caso es un nombre que ha adquirido muchos significados: tabernáculo o templo, pero en un plano más espiritual, como indica el Tarot, es el alma de la persona que conoce su divinidad, en cuyo caso la Sacerdotisa es nuestra Dimensión Yin, espiritual, trascendental, mística. Algunos teólogos cristianos relacionan el concepto de Shekhinah con la palabra griega "Parousia", "presencia" o "llegada", que se usa en el Nuevo Testamento de manera similar a "presencia divina". Cuando Jesús habla en el Evangelio de Mateo (18:20) de la presencia divina en las personas "Porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre, yo estoy en medio de ellos", alude en términos hebreos a la antigua Shekinah.

Aquí en la imagen la sacerdotisa sostiene la Torá en su mano y detrás las dos columnas de Boas y Jakin, el dual que también vemos en la tradición del Yin y el Yang, que no son otra cosa màs que los dos triángulos que forman la estrella de David o el Merkaba que domina su trono. Las letras en su vestido son el alfabeto hebreo, simbolo del conocimiento con el cual se cubre o se viste el alma. Le crepe nelle colonne stanno a significare la difficoltà del mondo duale che tende sempre a spezzarsi da una parte o dall'altra.

LA EMPERATRIZ ES MIRIAM, LA HERMANA DE MOISES

Cuando el faraón egipcio ordenó matar a todos los niños varones nacidos de los israelitas, Iojebed colocó a su hijo pequeño Moisés en una canasta en las aguas del río Nilo para salvarlo, encomendándolo a la providencia divina. Miriam, después de haberla acompañado, siguió el camino de la canasta hasta llegar al palacio del faraón, donde la hija del faraón encontró al bebé y decidió adoptarlo. Saliendo a la intemperie, la pequeña le preguntó a la princesa si quería una nodriza judía para destetar al bebé y, habiendo accedido, llamó a su madre para que hiciera esa tarea.

El profeta Miqueas la representa como una profetisa de igual importancia que la de los dos hermanos Moisés y Aarón (Miqueas 6,4) y recordamos que en el árbol de la vida, 3 son los caminos del primer triángulo en la parte superior marcados por 3 arcanos del Tarot: El Mago (Aarón) el Loco (Moisés) y la Emperatriz (Miriam).

Ahora decodifiquemos los símbolos: El faraón es la fuerza déspota que siempre tratará de matar a nuestro niño interior, la única forma de salvarlo es el viaje a través del agua (bautismo, arrepentimiento, conversión) de esta manera nos quedamos huérfanos (sin mundo). Miriam es la hermana, nuestra alteridad o instinto espiritual que nos vigila para darnos las oportunidades de la vida y nos lleva a la hija del faraón: es la belleza del mismo mundo que nos quiere matar dominándonos (su Padre, el Faraòn), simbolo del nundo materias que nos aprisiona, pero esta vez vista desde un punto de visto femenino, por tanto, el Yin, la dimensión psíquica del espíritu. De esta forma volvemos a estar en contacto con nuestra madre tierra, la naturaleza (Iojebed) sin ningún peligro para ambos, de esta forma se conquista la materia sin rechazarla. Y Moisés (nuestro niño interior) adquirirá toda la fuerza, la sabiduría y la herencia de la materia, de la corte del Faraón.

EL EMPERADOR MOISÉS SE ENFRENTA AL FARAÓN

Moisés es el misterio del Emperador contra otro emperador que es el faraón, es el choque dual que vive en cada uno de nosotros: luz y sombra, bien y mal, materia y espíritu, libres y esclavos, creyentes y ateos, Yang y Yin, todo està dentro de nosotros mismos. Este es un contraste inevitable, es parte de lo natural que es dual en su esencia, lo único que hay que entender es que cada uno de estos dos pueblos (judìos y egipcios) debe vivir en su propia tierra, no uno dominado por el otro. Esta es la obra de liberación, de distinción (no de división). Este desprendimiento se produce a través de pruebas (las 10 plagas de Egipto), sufrimientos, luchas, derrotas y una conciencia bien definida (el paso del Mar Rojo). Esta historia es un arquetipo de un viaje del alma interior hacia su exilio existencial. El palo (símbolo de sabiduría y enseñanza) que se convierte en serpiente (símbolo de independencia y libertad por medio de la rebelión o del veneno) es la prueba amenazadora que debemos realizar, como hizo Eva con la propia serpiente, para ir más allá de la búsqueda de al tierra prometida que es la trascendencia del alma humana.

SUMO SACERDOTE AARÓN

Es un personaje de la Biblia, hermano de Moisés y primer sumo sacerdote del pueblo judío. Aarón fue sólo un mediador de la sabiduría de Moisés quien, siendo tartamudo, encontró en su hermano el embajador adecuado. Este destino es simbólicamente precioso: Aarón tenía inteligencia práctica pero no la del corazón, como tantos gobernantes, eruditos, científicos, políticos, saben tanto a nivel teórico y virtual pero en la práctica no son concretos ni realistas, algunos incluso no saben hacer nada, solo hipnóticos discursos; Moisés representa esa sabiduría del corazón, la práctica, la experiencia humana, la de los que se ensucian las manos, hecho no palabras. El suelo o pavimento en la imagen es típico de la masonería, un tablero de ajedrez, movimientos entre el bien y el mal, altibajos. Detrás de Aarón se puede ver el Arca de la Alianza por lo que la suya era una función ministerial, ejecutiva y no directiva, la gestión esperada de Moisés, lo que deben hacer los pueblos: es el agricultor quien debe decir cómo hacer andar la economía. del país no un magistrado que nunca ha tomado una azada en sus manos. De hecho, cuando Aarón toma las directivas del pueblo, pensando que Moisés no regresaría del monte del Sinaí, lo hizo caer en pecado, ofreciéndoles la adoración del becerro de oro y es lo mismo que los gobernantes y ministros hacen hoy: nos ofrecen falsos ídolos para mantenernos buenos y entretenidos a nivel moral y psicológico.

ADÁN Y EVA

En este Tarot el arcano de los amantes se encarna en Adán y Eva, dos arquetipos, prototipos y símbolos alquímicos del mundo dual, el Yang y el Yin; el principio masculino del cielo y el espíritu con el principio femenino de la tierra y la materia. Dos árboles misteriosos: los del conocimiento del bien y del mal, nuevamente el dual, y el árbol de la vida, la práctica de tal conocimiento. Y de nuevo el dual: teoría y práctica, entre lo dicho y lo hecho hay mucho trecho que es la via del divino, el ángel del amor, el cupido de los griegos, el Dios del amor de los cristianos. Tiene en sus manos las 3 letras madres del alfabeto hebreo: Aleph, mem, shin (relacionadas con el aire, el agua y el fuego... la tierra es el ser humano, los amantes). Son los 3 principios del ser: unidad, polaridad, circularidad o mutación. Son las 3 energías vitales del antiguo pensamiento del I Ching: Wuji, Taiji y Yin-Yang. También son los 3 caminos horizontales del árbol de la vida y el corazón del Séfer Ietzirá o rueda de la creación.

EL MERKAVAH ERA EL CARRO DE DIOS

La palabra hebrea merkavah, (מרכבה) significa "carro, carroza", derivando de la raíz rkb, que significa "montar" y se usa en Ezequiel (1:4-26) con referencia al carro-trono de Dios con ángeles llamados Chayyot (חַיּוֹת) "seres vivientes", "criaturas", cada uno de los cuales tiene cuatro o seis alas, dos a los pies, dos a la altura del pecho y dos que cubren la cara, y cuatro caras según sus figuras (de un hombre, de un león, un águila y un buey). El objetivo del carro es simbólicamente una fuerza (motriz) que nos espolea, nos empuja, nos lleva a conquistar una dimensión celestial, también es un carro de guerra en el sentido que debemos luchar contra todas las adversidades que encontraremos en el camino espiritual. Las distintas caras son las mismas que encontramos en los arcanos del Mundo porque son un compendio de las distintas naturalezas que adquiere el alma en su totalidad. Las alas son 6 como las puntas del merkaba o estrella de David que es el doble triángulo que conforma la doble dimensión en armonía (Yin-Yang). En el Tarot este carro armado es la voluntad humana.

LA REINA DE SABA

La reina de Saba era la reina del antiguo reino de los sabeos. Aparece en la Biblia tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento y Jesús habla de ella. También el Corán y en el libro Kebra Nagast, la historia de Etiopía, cuenta que tuvo un hijo del rey Salomón.

Era una reina muy rica por lo tanto independiente y esta era su fuerza material, mientras que la interior y espiritual es su sed de conocimiento, por eso buscó un hombre sabio y fue donde Salomón. En este sentido es una verdadera Emperatriz, una fuerza Yin constructiva, busca la sabiduría no las apariencias, busca al hombre que la haga crecer aunque ya sea sabia quiere un compañero a su altura y de su dignidad. Este es el mensaje de la Reina de Saba: rodeémonos de personas que nos den belleza, comprensión, positividad, conocimiento y fuerza interior.

EL ERMITAÑO

En este arcano vemos a Moisés en el desierto contemplando la zarza ardiente en el monte Sinaí, el lugar donde Dios designa a Moisés para conducir y librar a los israelitas desde Egipto hasta los cananeos. Recordemos que en esta zarza Moisés tuvo las más grandes revelaciones: la voz de Dios se describe a sí mismo como "Yo soy lo que soy" por lo tanto es el Ser, el Uno, el Absoluto. Por eso la zarza nunca se apaga, nunca deja de arder, es como la verdad, como el amor, como el Ser Infinito. En la soledad todos somos llamados por esta voz que arde en nuestro interior, muchas veces muchos no saben identificarla, pero es un dulce tormento, una suave melancolía, una sed de absoluto que nunca se apaga.

LA RUEDA

Los 4 vientos encarnados en los ángeles vivientes son los que hacen girar la rueda de los acontecimientos, cuyo centro es el tradicional adivinatorio o pectoral del Efod que usaba el sumo sacerdote Aronne, llamado Urim y Tumim, adornado con doce piedras (urim y tumim significa revelación y verdad) se colocaban en su interior pergaminos en los que se escribía el inefable Nombre de Dios o, en la práctica de la adivinación, prohibiciones o mandatos que habìa que evitar o cumplir. Entonces, al extraer la hoja elegida, se recibía la indicación divina para realizar (un poco lo que hacemos con las cartas del Tarot cuando se toca al azar una carta dentro del mazo). En la novela El alquimista de Paulo Coelho, el rey de Salem entrega al protagonista Santiago dos piedras a las que llama urim y tummim. Uno de los dos es negro y se le da el significado de afirmación (sí) mientras que el otro es blanco y significa negación (no); estos significados son aplicables cuando se saca una piedra al azar de una bolsa después de que se haya hecho una pregunta apropiada. El rey mismo quitó las dos piedras de su brillante coraza.

JUSTICIA

El misterio de la justicia es imparcial, una luz blanca y negra, ilumina el bien y el mal, es el conocimiento del bien y del mal, la escritura en el vestido Shekinah es equilibrio (justicia sin justificaciones). Es muy difícil adquirir este equilibrio, una observación cuidadosa sin juicio, una opinión neutral. En el centro de la mesa se puede ver un olivo, es símbolo de regeneración después de la destrucción y también signo de paz (la rama de olivo fue la que trajo la paloma a Noe como señal de que la tierra volvía a ser habitable y ya no bajo el diluvio de aguas mortales). Por lo tanto, la justicia todavía evoca una injusticia porque también es correcto aceptar nuestra injusticia. Es a partir de este punto que comienza el despertar.

SEMEYAZA, EL ÁNGEL COLGADO

Según la tradición relatada en el Libro de Enoc y en el Libro de los Gigantes (libros canónicos en las Iglesias ortodoxas etíope y eritrea) Semeyaza es el líder de los ángeles caídos, el mismo que las tradiciones judeocristianas posteriores lo identifican con Lucifer y Satán. Se le describe como el líder de los ángeles que, al observar a las muchachas que poblaban la tierra, se enamoran y deciden bajar del cielo para unirse a ellas. De estas uniones nacen los gigantes, pueblo protagonista del libro homónimo y de sucesivas tradiciones judías. Además, los ángeles enseñan a los hombres la construcción de armas, el corte de piedras preciosas, la astronomía y otras artes, de manera similar a como lo había hecho Apkallu en la mitología sumeria o Prometeo que enseñó a los hombres el secreto de los dioses del Olimpo griego. Dios interviene enviando a los arcángeles Miguel, Gabriel, Rafael y Uriel para castigar y encarcelar a los ángeles caídos. Detrás de esta leyenda, sin embargo, está a nivel psicológico el hecho de que lo mejor de nosotros viene de las ruinas, el conocimiento siempre va más allá de lo desconocido tratando de cruzar fronteras y es esta ruptura de límites lo que siempre nos hace progresar.

LA MUERTE DE MOISÉS

Un antiguo relato del Midrash nos cuenta cómo murió Moisés, un encuentro maravilloso, poético, incluso amoroso: “Se escuchó una voz del cielo que decía a Moisés: Moisés, es el fin, ha llegado la hora de tu muerte. Dijo a Dios: Te lo ruego, no me abandones en manos del ángel de la muerte. Pero Dios bajó del cielo para tomar el alma de Moisés y le dijo: Moisés, cierra los ojos y Moisés los cerró; entonces él dijo: Pon sus manos sobre tu pecho y Moisés así lo hizo, entonces dijo: Ahora junta tus pies y Moisés los acercó. Entonces Dios llamó al alma de Moisés diciendo: Hija mía, he fijado un tiempo de 120 años durante los cuales viviste en el cuerpo de Moisés. Ahora ha llegado tu fin; vete, no te demores. Y el alma: Rey del mundo, amo el cuerpo puro y santo de Moisés y no quiero dejarlo. Entonces Dios besó a Moisés, le tomo su ultimo respiro en el beso y tomó su alma con un beso de su boca, entonces Dios lloró por la muerte de Moisés”. La muerte en esta imagen es pura poesía, es un encuentro de amor, es un renacimiento, cuando mueres es como un parto al revés, te espera quièn te ama.

TEMPLANZA

Este es el arcano más emblemático de todo el Tarot, porque todo el fruto del trabajo interior se basa en saber adquirir el equilibrio, la capacidad de vivir en el mundo dual, en el camino del medio. Aquí Adán y Eva, por tanto los polos opuestos de nuestra psique, el Yang y el Yin, están en armonía, unidos, son capaces de sostener la acción de mezclar y juntar opuestos como el fuego y el agua, el aire y la tierra son dóciles maestros de los elementos, por lo tanto, un símbolo de autocontrol. Es una obra divina como lo indica arriba la fuerza angelical alada con las 3 letras madres del alfabeto hebreo: Aleph, mem, shin (vinculadas al aire, agua y fuego... la tierra es el ser humano, los amantes). El altar sobre el que realizan este ritual es la creación con la estrella de David que, sin embargo, está formada por dos triángulos, los mismos polos masculino y femenino del mundo dual, esta vez fuertemente entrelazados y sólidos.

ASMODEO, EL DIABLO

Es considerado, además del demonio de la destrucción, también el señor de la codicia, la ira, la discordia y la venganza, se dedica a conspirar para destruir la armonía del matrimonio o para destruir la belleza de las muchachas aún vírgenes. En demonología es un poderoso demonio bíblico judío, perteneciente a la jerarquía de los ángeles de Satanás. De hecho, la figura se menciona por primera vez en las antiguas tradiciones mitológicas babilónicas y caldeas del parsismo y el zoroastrismo, pero en la Biblia la huella escrita de Asmodeo está sobre todo en una historia del Libro de Tobías, citada como un poderoso símbolo del diablo de discordia marital.

LA DESTRUCCIÓN DEL TEMPLO

El Templo de Salomón fue el primer templo judío en Jerusalén. Era el foco de la religión. Según las fuentes rabínicas de la Torá Oral, la construcción del Templo comenzó en el año 967 a.C. y fue terminado en 960 a.C, y luego fue destruido por el babilónico Nabucodonosor II en 586 a.C. Después del exilio de Babilonia, los judíos reconstruyeron el templo de Jerusalén: esta reconstrucción tomó el nombre de Segundo Templo. Herodes el Grande, a partir del 19 a.C. realizó una importante ampliación del Segundo Templo; por eso el Templo de Jerusalén, desde esa fecha, es llamado también Templo de Herodes. Pero este templo fue destruida nuevamente en el año 70 d.C. por el general romano Tito.

Hoy sigue siendo el famoso muro de los lamentos en Jerusalén con lo poco que ha quedado.

Famosa era la Menorá, una lámpara de aceite de siete brazos que en la antigüedad se encendía en el interior del Templo de Jerusalén mediante la quema de aceite consagrado, que simboliza los siete días de la creación (sábado en el centro) y los 7 planetas.

En el Tarot nada mejor que representar la caída de la Torre con la destruciòn del Templo, por cuanto creamos de estar muy seguros, aún creyendo que estamos de la parte de Dios, siempre podemos caer y fallar, porque Dios una potencialidad psíquica interior que esta en el alma, no està dentro de un edificio de adobes o ladrillos. Adherirse es nuestra dignidad interior y no a apariencias externas. Es humillante que la casa de Dios sea un monumento lujoso y gigantesco mientras sus fieles o hijos viven en tugurios miserables.

LA ESTRELLA DEL ESPERO

Hesperus en griego, Véspero en latín, era la personificación de la luz del atardecer, originalmente mientras que Hesperus era la luz del atardecer, Fòsforu era la luz de la mañana, pero tras el descubrimiento de que las dos estrellas son en realidad dos manifestaciones del mismo planeta Venus, las dos figuras fueron asimilados en uno. Fue Pitágoras quien identificó en el planeta Venus tanto la estrella vespertina (Héspero) como la estrella matutina (Fósforo). Más tarde, en la mitología romana, Fósforo y Hesperus fueron identificados como una sola deidad que tomó el nombre de Lucifer, o "Portador de luz". Finalmente, Lucifer se convirtió en la personificación del Diablo en el cristianismo. Sin embargo, es la estrella más brillante de nuestro firmamento, como lo es el amor entre nuestras pasiones más oscuras y más lucientes, un llamado verdaderamente celestial, asì tambièn las escrituras dicen que Lucifer era el ángel màs brillante del cielo. En esta carta del Tarot Venus es la diosa del amor, la estrella que guía nuestros sueños, de ahí el símbolo del pájaro de la realidad onírica. Las ánforas de agua son siempre la búsqueda del equilibrio entre el cielo y la tierra

EL INCONSCIENTE DE LA LUNA

Este es el arcano más introspectivo, reflexivo, como la luz de la Luna es el reflejo de la luz del sol, lo mismo que sucede en el inconsciente que proyecta la luz divina del creador a través de la oscuridad, también proyecta las acciones de los demás a través de nuestras regresiones, aversiones, miedos, fobias. Es un viaje de regreso, hacia atras, por eso está el cangrejo, es el movimiento hacia el pasado, pero el camino que va a la luna está enmarcado por el mundo dual, siempre hay dos columnas, o dos torres, o dos orillas y estos a su vez custodiados por dos animales, en este caso son demonios: Samael y Lilith.

Samael, nombre que significa el castigo de Dios, según la religión judía es un arcángel en la tradición talmúdica, tiene el papel de acusador, seductor y destructor, muchas veces asociado con el ángel de la muerte (Azrael). Se considera arbitrario, bueno y al mismo tiempo cruel. Hay que tener cuidado de no asimilarlo a Lucifer, porque Samael interviene por voluntad divina para probar al hombre, mientras que Lucifer interviene para desorientarlo por completo. Es nuestro Yang, racional. Lilith, por otro lado, es la contraparte, el Yin emocional, por lo que mientras Samael es la razón, Lilith es la que siempre tiene la razón, ella es el demonio femenino asociado con la tormenta, que se cree que trae la desgracia, la enfermedad y la muerte. La figura de Lilith aparece inicialmente en un conjunto de demonios y espíritus ligados al viento y la tormenta, como es el caso de la religiosidad sumeria de Lilitu, hacia el 3000 a.C. En el folclore judío de la Edad Media Lilith se convierte en la primera compañera de Adán, creado junto a él antes que Eva. La creación de Eva, de hecho, se relata en detalle en el segundo capítulo del Génesis, pero ya en el primero se afirma que Dios creó a la humanidad "varón y hembra" y esto dejó espacio para que los cabalistas medievales elaboraran el relato satírico de un primera esposa de Adán y darle incluso personalidad demoníaca. Lilith habría estado en constante conflicto con su esposo, era una mujer libre y no se dejaba dominar, pues se negaba a obedecerle y eventualmente habría escapado del Paraíso terrenal y habría preferido vivir con los demonios antes que regresar con Adán.

EL SOL NACIENTE

El sol es la fuente de la vida, también símbolo de la vida espiritual si es visto como luz absoluta. Dar a luz es una forma simbólica de nacer y aquí vemos al ser humano en su dualidad que nace, macho y hembra, de la vasija que se rompe, el huevo cósmico, pero también es el Ego divino que se abre en su plenitud, dando origen al género humano, reflejo de lo divino. Es nuestro niño interior quien ve la luz cuando la conciencia es alcanzada por nuestro inconsciente.

EL JUICIO

Un arcano maravilloso, el juicio es la plenitud de la verdad, no es una condena ni una sentencia, es una conciencia. Aquí Dios se encuentra ante su propia presencia (Yahve con la Shekinah), lo que muchas veces repetimos en el camino de la conciencia espiritual: encontrarse consigo mismo, amarse en el modo justo y eso es el juicio que es claridad, es verse uno mismo en plenitud de realidad, esto significa renacer o resucitar, por eso en la imagen se ven detrás las 3 tumbas abrirse a la luz, a la verdad y al conocimiento.

EL MUNDO DE LOS AMANTES

El mundo de los amantes es otro mundo, muchas veces en la pareja el otro se convierte en tu mundo y tú en un satélite, porque el amor nos lleva a esto: a vivir el uno para el otro, con el otro, por el otro y del otro, incluso a vivir psicológicamente en el otro ( en sus pensamientos). El amor es una fuerza constructiva pero también devastadora si no se la iguala en modo correspondiente. De hecho, las cuatro figuras que enmarcan esta carta son las fuerzas de la naturaleza y la guirnalda de flores el aureola de dominio sobre la materia misma, un portal a otra dimensión. El amor del hombre es el mundo, el mundo de la mujer es el amor, estas tendencias paralelas sólo pueden cruzarse si su mundo se convierte en el amor que nos descubre y, especularmente, entonces el círculo se cierra y se vuelve a abrir: el amor se convierte en un mundo por descubrir.